Salitreras Humberstone y Santa Laura abren sus puertas en horario normal durante toda la semana
Un nuevo paso en la modalidad de apertura dio el Sitio Patrimonio de la Humanidad, Salitreras Humberstone y Santa Laura, al establecer la apertura en horario normal, de lunes a domingo, entre las 09.00 a las 18.00 horas, a partir del próximo lunes 14. La medida fue adoptada ante el excelente comportamiento de los turistas y la posibilidad de ofrecer mejores alternativas horarias al restablecer el horario normal y abriendo sus puertas sábados y domingos.
Desde que este espacio museográfico, hito del turismo patrimonial en nuestra región, empezó a abrir sus puertas, la llegada de visitantes ha ido en constante aumento, tanto provenientes de la región como del resto del país. El protocolo sanitario se aplica con la misma rigurosidad del primer día, encontrando una excelente disposición por parte de los turistas, según señaló Georgina Pastenes, Administradora del Sitio.
El turista, lo primero que hace es acercarse a una máquina que en forma automática le toma la temperatura. Luego pasa por la caja para adquirir el ticket de ingreso y firma el libro para ratificar que no es portador del Covid ni tiene síntomas de la enfermedad. Todo este procedimiento, con constate limpieza de manos con alcohol gel, provisto en distintos lugares.
Explicó la Administradora que el visitante debe utilizar la mascarilla en todo momento, incluso en los lugares abiertos, donde no se exige aforo. Distinto ocurre con las salas temática que indica en las puertas, la cantidad de personas que pueden permanecer simultáneamente, dependiendo del tamaño del lugar.
IMPRESIONES
En un recorrido por Humberstone nos encontramos con Cristian, abogado de San Antonio y su esposa Paula, quien resaltó el cumplimiento de las medidas sanitarias. “Creemos que es un lugar que todas las personas debieran visitar, por su alto valor histórico”
Gerardo Loyola, aunque es iquiqueño, su familia se trasladó a Rancagua cuando era pequeño y ahora decidió recorrer las salitreras, junto a su pareja “No conocía este lugar, que es Patrimonio de la Humanidad y que tiene mucha historia; además ver en terreno cómo era la vida en esa época. Hemos visto que todo se mantiene por lo que nosotros es como retroceder en el tiempo”.