Condenan a 10 años de presidio a hombre que disparó contra dirigente vecinal en Laguna Verde, Iquique

AlejandraAgosto 23, 2024
carabineros

Zamir Alexis Carabali Barco, un ciudadano de nacionalidad colombiana, fue condenado a un total de 10 años y un día de presidio por los delitos de homicidio frustrado y tenencia ilegal de arma de fuego. Los hechos ocurrieron en agosto de 2021, durante las celebraciones por la independencia de Bolivia en el sector de Laguna Verde, en Iquique, cuando Carabali disparó contra un dirigente vecinal, dejándolo con graves lesiones.

El juicio, dirigido por la fiscal Jócelyn Pacheco, estableció que “el día 6 de agosto del año 2021, alrededor de las 22:00 horas, en la intersección de pasaje Esperanza con Monte Sinaí del sector de Laguna Verde, el acusado intentaba circular en su vehículo particular por dicha calzada, pese a que la circulación se encontraba interrumpida por la celebración del día de la independencia de Bolivia. Esta situación lo ofuscó, manifestando a las personas que se encontraban en el lugar ‘ustedes no son dueños del pasaje’, siguiendo su camino”. Sin embargo, el imputado regresó al lugar poco después, y “sin motivo alguno agredió a la víctima que se encontraba en el lugar, disparándole con un arma de fuego con la intención de matarlo, recibiendo la víctima un disparo en su abdomen y otro en su extremidad inferior izquierda”.

Durante el juicio, la Fiscalía, junto a la abogada querellante del Centro de Atención Integral a Víctimas (CAVI), presentó evidencia clave, incluyendo los testimonios de la víctima y su pareja, quienes detallaron cómo ocurrieron los hechos y el impacto de las lesiones. El dirigente vecinal quedó incapacitado para trabajar durante varios meses y sufre una cojera permanente, además de secuelas psicológicas. Estos efectos fueron corroborados por un médico del Hospital Regional, un perito del Servicio Médico Legal y un psicólogo.

Funcionarios de Carabineros que participaron en las diligencias testificaron sobre la identificación y captura del acusado, quien fue detenido en octubre de 2023, más de dos años después del ataque.

La condena incluye siete años de cárcel por homicidio frustrado y tres años y un día por la tenencia ilegal de arma de fuego, reflejando la gravedad de los delitos y las secuelas dejadas en la víctima.